Incubadoras de start ups: España quiere sacar la cabeza entre los grandes

España acostumbraba a quedarse atrás en buena parte de las innovaciones. Afortunadamente esta tendencia parece estar cambiando de signo. Es lo que está ocurriendo con las llamadas lanzaderas o incubadoras de start ups: existen ya en nuestro país varios centenares de este tipo de iniciativas, y están creciendo.

Como ocurre en otros países, la punta de lanza de este movimiento la constituyen grandes compañías y grandes empresarios con altos patrimonios, que han encontrado en esta fórmula una vía para canalizar sus aspiraciones de mecenazgo y, por qué no decirlo, devolver a la sociedad una parte de lo que han recibido de ella, en términos de recursos económicos, pero también de equipos e instalaciones materiales y de “expertise”.

Estas iniciativas tratan de apoyar a quienes tienen un proyecto en la cabeza aportando medios y recursos de gestión de los que normalmente carecen estos emprendedores, y transmitirles toda una serie de recomendaciones e ideas de gran utilidad para quienes no dispone de experiencia en la gestión.

Recomendaciones como las que recientemente transmitía el director general de Lanzadera, Javier Jiménez en un acto de la Universitat Abat Oliba – CEU, entre ellas la de no sobreestimar la idea inicial hasta el grado de la obcecación. Hay que saber escuchar al mercado y las opiniones de los demás. “La idea es el enemigo número uno del emprendedor. Hay gente que se enamora tanto de su idea que se queda ciego”, señalaba.

Lanzadera es una de las incubadoras pioneras creada por el presidente de Mercadona, Juan Roig, que hoy cuenta entre sus partners con empresas e instituciones como Amazon, Microsoft, Sabadell, Gurpo Intercom o la Fundación Repsol. En sus cuatro años de experiencia Lanzadera ha evaluado 8.000 propuestas, de las cuales ha acelerado 150.

No es necesario tener dinero

El papel que hoy quieren jugar las incubadoras y aceleradoras puede resumirse en una frase de Jiménez: “no es necesario tener dinero para emprender”. Potenciar esta clase de iniciativas es la razón de ser de las incubadoras.

Existen hoy en España varios centenares de este tipo de iniciativas, algunas de ellas creadas solamente para esta función, otras ligadas a entidades bancarias u otros organismos, públicos y privados, de promoción empresarial. Entre las más activas en nuestro país se encuentran Wayra, perteneciente a Telefónica, Fundación Everis, Seed Rocket, Grupo Intercom, Sonareventures ó Conector.